MEDICAMENTOS EN ENVASE UNIVERSAL: UNA SOLUCIÓN SOSTENIBLE Y ECONÓMICA

Tijuana, Baja California, 16 de diciembre de 2024. – La distribución de medicamentos a través de las Farmacias del Bienestar, implementada por el gobierno federal, plantea un desafío logístico que podría convertirse en un caso de éxito para la economía circular.

 

Según el ingeniero bioquímico José Carmelo Zavala Álvarez, director del Centro de Innovación y Gestión Ambiental México A.C. (CIGAMX) y experto en temas ambientales, la introducción de envase universal podría generar ahorros significativos, mejorar la eficiencia en la distribución y, a su vez, disminuir el impacto ambiental de la industria farmacéutica en México.

 

“Entre envase, empaque y embalaje puede estar casi el 60% o 70% de los residuos sólidos urbanos”, señaló Zavala Álvarez. Este porcentaje pone en perspectiva la necesidad de replantear cómo se manejan los materiales en la cadena de suministro de medicamentos. Actualmente, cada producto se encuentra envuelto en múltiples capas, que incluyen frascos, cajas y embalajes adicionales, lo que incrementa tanto el volumen como el peso durante el transporte, encareciendo los fletes y generando una cantidad considerable de basura.

 

Otro problema crítico es el manejo ineficiente de los medicamentos sobrantes. Zavala Álvarez destacó que “una quinta parte, aproximadamente el 20%, de los medicamentos surtidos en farmacias terminan como sobrantes”. Este excedente frecuentemente se descarta en la basura o incluso en el drenaje, lo que contribuye a la contaminación por fármacos, considerados contaminantes emergentes.

 

Además, señaló que entre el 30% y 40% de los medicamentos consumidos por los pacientes son excretados y llegan al sistema de aguas residuales. Este fenómeno genera riesgos ambientales significativos, pues los medicamentos no tratados adecuadamente pueden alterar los ecosistemas acuáticos.

 

En este contexto, Zavala Álvarez propone la adopción de un modelo basado en envases universales, similar al que utilizan algunos sistemas de salud en Estados Unidos. Estos envases, diseñados con características específicas como cierre de seguridad, boca ancha y materiales inertes, pueden reutilizarse para diferentes tipos de medicamentos.

 

“Envasar a granel y surtir únicamente la dosis necesaria para cada tratamiento ahorraría cantidades estratosféricas en el flete, empaque y embalaje”, explicó Zavala Álvarez. Este enfoque también podría reducir los costos de producción al estandarizar los envases, permitiendo su fabricación en mayores volúmenes y con materiales reciclables o reutilizables.

 

El uso de envase universal presenta beneficios claros:

1. Reducción de residuos sólidos: Menos materiales desechados al eliminar embalajes innecesarios.
2. Ahorro en costos logísticos: Menor volumen y peso durante el transporte.
3. Sostenibilidad ambiental: Fomenta el reciclaje y reutilización de materiales, alineándose con principios de economía circular.
4. Optimización de dosis: Evita el desperdicio de medicamentos al surtir únicamente la cantidad necesaria para el tratamiento.

 

Este enfoque no solo impacta a la industria farmacéutica, sino que también se alinea con las políticas de sostenibilidad impulsadas por el gobierno federal. Zavala Álvarez subrayó la importancia de un trabajo transversal entre la Secretaría de Salud, la SEMARNAT y otros actores clave para implementar estas medidas.

 

Además, el experto destacó que este modelo también debe considerar el ecodiseño de los envases, priorizando materiales reciclables y una geometría que facilite su reutilización. “Si el envase es de un solo material, se puede reciclar más fácilmente, o incluso reusar cuando el producto que vamos a utilizar no sea sensible”, agregó.

 

El uso de envase universal para los medicamentos en las Farmacias del Bienestar podría generar ahorros económicos del 20% al 30% en compras y logística, según Zavala Álvarez. Además, permitiría disminuir significativamente la generación de residuos sólidos urbanos y reducir las descargas de contaminantes al drenaje.

 

“Es una idea que refleja el interés del gobierno federal en temas ambientales y en la economía circular”, concluyó Zavala Álvarez, destacando que este tipo de iniciativas demuestran el liderazgo de una administración comprometida con la sostenibilidad, encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum.

 

La adopción de envase universal es un paso hacia una gestión más eficiente y responsable de los recursos, con beneficios económicos, logísticos y ambientales que podrían convertir a la actual administración federal en un referente de innovación sostenible en la distribución de medicamentos en México.