Varios de estos cuerpos momificados desaparecieron de forma misteriosa de sus vitrinas en el Museo de las Momias de Guanajuato.
Por lo menos es lo que asegura su exdirectora, Paloma Robles, quien a raíz de algunas sospechas sobre el mal manejo que se les ha dado a los cuerpos en los últimos años, solicitó un inventario de la colección.
“Se me informa la existencia de 95 cuerpos lo cual me pareció escandaloso porque personalmente vi y conté 117”, dijo Paloma Robles.
Días después solicitó otro informe al actual director del museo.
“Posteriormente solicito el resguardo suscrito por el titular del museo de las Momias de Guanajuato y nuevamente veo el número 117. Hay una diferencia de 22 cuerpos entre esos dos documentos proporcionados por la administración pública municipal”, agregó.
Sin embargo, autoridades municipales negaron que exista un faltante.
“No es verdad bajo ninguna circunstancia que existan faltantes de cuerpos en la colección de las momias de Guanajuato”, señaló por su parte Jesús Antonio Borja, director de Cultura.
Además, aseguraron que en esta administración se ha invertido en limpieza y conservación de los cuerpos como nunca antes se había hecho.
“Estamos actualizando el inventario que no se ha actualizado desde 2008, a pesar de que pasó por varias administraciones, por varios directores y por varias directoras que nunca actualizaron este inventario con lo cual se tendrá una mayor certeza de que la colección está completa”, añadió Borja.
De cualquier forma, la exdirectora presentó una denuncia ante la Auditoria Superior del Estado de Guanajuato por los supuestos de riesgo de daño y pérdida de momias.
