Aborda el trabajo fotográfico de Francisco Galván realizado entre 1918 y 1963 en Baja California y distintos puntos de México. Sus imágenes conforman el Foto Archivo Celia Galván Ramírez, un patrimonio fotográfico y cultural de cien años de antigüedad, y que por primera vez a través de una publicación se aborda el tema de la importancia de rescatar, conservar y divulgar los foto archivos familiares en la región.
En tres nichos temáticos (Tijuana y sus lugares de memoria, paisajes y escenarios del Desierto Central de Baja California y viajando por el centro de la República), se ilustra el universo de matices de este foto archivo familiar; dejando en claro que no solo son fotografías de cumpleaños, bautizo y bodas, sino microhistorias visuales que conforman el pasado de una familia en el devenir histórico del espacio que habitan.
Francisco Galván, fue un fotógrafo aficionado, que se dedicó a ser chofer, carga maletas, capitán honorario del aeródromo de Bahía de los Ángeles, Baja California, y empresario al abrir un restaurante en un paraje en Rosarito, Baja California, donde años más tarde se convirtiera en lo que es hoy Puerto Nuevo.
Por su trabajo como chofer se hizo de amigos en distintas rutas de transporte, que lo llevó a viajar por Sinaloa, Ciudad de México, Michoacán, Guadalajara, entre otros puntos. Lo importante es que en la fotografía encontró la forma de representar el cómo vivía y veía el entorno.
El historiador, Andrés Waldo Espinoza, fue seleccionado en la edición 35 del Programa de Fomento y Coinversiones Culturales del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA), para publicar el libro Francisco Galván, viajero de la lente, 1918-1963 bajo el sello editorial del Instituto de Investigaciones Culturales-Museo de la Universidad Autónoma de Baja California.
Libro que tiene como objetivo revalorar los foto archivos de familia como parte esencial para el sentido de pertenencia e identidad para esta y las futuras generaciones.
En la presentación realizada de manera virtual a través de las redes oficiales del Instituto Municipal de Arte y Cultura (IMAC) y del Archivo Histórico de Playas de Rosarito, participaron, Celia Galván Ramírez, cronista comunitaria, hija del fotógrafo aficionado Francisco Galván, el historiador, Andrés Waldo Espinoza, textos y curaduría del libro y Beatriz Torres Limones con comentarios del libro.